«Domo de Calor», fenómeno que está causando las altas temperaturas en el continente americano

El fenómeno del «domo de calor» está causando estragos en México, Centroamérica y el sur de Estados Unidos, llevando a millones de personas a soportar temperaturas muy altas. Esto provoca una sobrecarga en las redes de energía y provocando situaciones extremas en la fauna local. Este calor extremo se produce en un contexto de cambio climático, impulsado por los gases de efecto invernadero. Esto es resultado de la quema de combustibles fósiles como el petróleo, el gas y el carbón.

¿Qué es un Domo de Calor?

Un domo de calor es una zona de alta presión atmosférica que se estaciona en una región durante un periodo prolongado, atrapando el aire caliente y evitando la formación de nubes. En este caso, el domo de calor está centrado en el sur del Golfo de México y el norte de Centroamérica. Esta situación meteorológica impide la formación de nubes, permitiendo que el sol brille intensamente y elevando las temperaturas a niveles extremos.

Impacto en México y el Sur de Estados Unidos

Las temperaturas elevadas no solo afectan a México, sino que también se extienden a lo largo del Golfo de México hasta partes de Estados Unidos. En Texas, miles de personas se quedaron sin electricidad debido a las tormentas eléctricas que golpearon la región la semana pasada, exacerbando la situación al combinarse con el intenso calor. Los vientos del sur que provienen de los trópicos han transportado aire caliente y húmedo hacia el norte, contribuyendo a estas condiciones inusualmente cálidas.

Registros de Temperaturas Históricas

En el sur de Florida, el calor ha sido más intenso de lo habitual. Por ejemplo, el Aeropuerto Internacional de Miami registró una temperatura máxima de 35.6 grados Celsius el 19 de mayo, superando por cinco grados la media habitual de la época. Los pronósticos meteorológicos advierten que algunas zonas de Texas podrían alcanzar temperaturas de hasta 43.9 grados Celsius.

Efectos en la Vida Silvestre y el Medio Ambiente

El calor extremo también ha tenido un impacto devastador en la vida silvestre. En las selvas del sudeste mexicano, más de 130 monos aulladores han muerto. En la parte norte del país se ha reportado una mayor mortalidad de aves. La combinación de calor extremo y otros factores ha contribuido a estas muertes. Además, las bajas precipitaciones han provocado la sequía de lagos y represas, afectando el suministro de agua en muchas áreas.

Consecuencias para la Salud y la Sociedad

En la Ciudad de México, las altas temperaturas han agravado los problemas de contaminación, aumentando las concentraciones de ozono y poniendo en riesgo la salud pública. La falta de agua ha generado protestas, como la de policías que bloquearon una avenida principal debido a la escasez de agua en sus comisarías. Las autoridades han tenido que transportar agua en camiones cisterna a hospitales y equipos de extinción de incendios para enfrentar la situación.

Impacto en la Temporada de Huracanes

Los expertos también están preocupados por el efecto del domo de calor en la temperatura del agua del océano y su influencia en la próxima temporada de huracanes en el Atlántico. Con el cambio de la fase de El Niño a La Niña, aumenta la probabilidad de que se formen ciclones tropicales. Esto daría lugar a las altas temperaturas del océano. La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha pronosticado un 85% de posibilidades de que la temporada de huracanes en el Atlántico sea superior al promedio.

Medidas y Pronósticos Futuras

En México, se prevé otra ola de calor para junio, aunque se espera que sea más corta y menos severa que la actual. En Guatemala, el calor extremo y los incendios forestales han llevado a las autoridades a prohibir actividades al aire libre en las escuelas de la capital debido a la mala calidad del aire. Otros países de la región, como Belice, El Salvador, Honduras, República Dominicana y Haití, también están experimentando temperaturas anormalmente altas debido a esta área de alta presión.

El domo de calor está demostrando ser un fenómeno climático de gran impacto, exacerbado por el cambio climático global. Es crucial que las autoridades y la población tomen medidas para mitigar sus efectos y adaptarse a estas nuevas realidades climáticas.

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